Médicos sin Fronteras es una organización humanitaria internacional fundada en 1971. Está dedicada a proporcionar asistencia médica a las víctimas de conflictos armados, catástrofes naturales y exclusion social, sin discriminación ni consideración a la ideología, religión, raza u origen étnico de las personas que atienden. Hasta la fecha, Médicos sin Fronteras ha trabajado en más de 60 países.
La organización se rige por los principios de independencia, neutralidad y humanidad. Los voluntarios de Médicos sin Fronteras trabajan en condiciones extremas para llevar ayuda a aquellos que más lo necesitan. Son médicos, enfermeras, cirujanos, especialistas, logísticos, expertos en salud pública y profesionales de otras disciplinas, muchos de ellos con experiencia en situaciones de crisis.
Médicos sin Fronteras es una de las mayores organizaciones humanitarias del mundo. En 2019, contaba con 42,000 miembros de personal, incluidos 3,000 médicos, envenenadores, enfermeras, cirujanos y otros profesionales de la salud, así como otros trabajadores no médicos. En ese año, la organización atendió a más de 23 millones de pacientes en más de 70 países y llevó a cabo más de 9,000 intervenciones quirúrgicas.
Médicos sin Fronteras recibe el 85% de sus fondos de donantes privados, y el 15% restante de gobiernos, fundaciones y otras instituciones. En 2019, la organización recibió más de 2,000 millones de dólares en donaciones.
Médicos Sin Fronteras (MSF) es una organización humanitaria internacional y no gubernamental que trabaja en más de 60 países para prestar atención médica a las víctimas de conflictos armados, catástrofes naturales y epidemias, y también para luchar contra la exclusión de la atención médica. MSF es una ONG con reconocimiento de interés público, lo que significa que el estado francés le reconoce una función esencial en la sociedad y le otorga ciertos privilegios y exenciones fiscales. Sin embargo, MSF no recibe ningún financiamiento del gobierno francés, ni de ningún otro gobierno, y es totalmente independiente de cualquier gobierno o institución política. El 100% de los fondos de MSF provienen de donaciones de particulares de todo el mundo.
MSF se fundó en 1971, en la ciudad francesa de París, por un grupo de médicos y periodistas que querían hacer algo ante la indiferencia del mundo ante el genocidio de Bengala. Desde entonces, MSF ha estado presente en numerosos conflictos armados, catástrofes y epidemias en todo el mundo. En 1979, MSF recibió el Premio Nobel de la Paz, y en 2017 fue galardonada con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, entre otros muchos premios. MSF es reconocida internacionalmente por su labor humanitaria, y es una de las ONG más grandes y con mayor impacto a nivel mundial.
MSF se rige por los principios de independencia, neutralidad e imparcialidad. MSF no toma partido en ningún conflicto armado, y su único objetivo es prestar atención médica a las víctimas, independientemente de su religión, raza, nacionalidad o ideología. MSF también se esfuerza por ser imparcial en todas sus acciones, y trata a todas las personas por igual, sin discriminación.
MSF es una ONG internacional, con sede en Ginebra, Suiza, y tiene más de 40.000 miembros en todo el mundo, de más de 150 nacionalidades diferentes. MSF se divide en seis secciones: MSF Francia, MSF Suiza, MSF Bélgica, MSF España, MSF Holanda y MSF Internacional. Cada sección es totalmente independiente y autónoma, y tiene su propio consejo de administración, presidente y equipo de trabajo.
La labor de MSF se sustenta en tres pilares: atención médica, investigación y formación. En cuanto a la atención médica, MSF trata de llegar a las zonas más afectadas por conflictos armados, catástrofes naturales o epidemias, con el objetivo de brindar atención médica a las víctimas. En lo que respecta a la investigación, MSF se esfuerza por mejorar sus prácticas médicas y técnicas, así como por desarrollar nuevos medicamentos y vacunas. En cuanto a la formación, MSF trata de formar a médicos, enfermeras y otros profesionales de la salud, tanto en Francia como en el extranjero.
Médicos Sin Fronteras (MSF) es una organización humanitaria internacional fundada en 1971. Su misión es brindar atención médica a poblaciones en crisis, independientemente de raza, religión o credo, en situaciones de guerra, conflictos armados y catástrofes naturales.
MSF tiene su sede principal en Ginebra, Suiza, y está presente en más de 70 países. MSF trabaja en más de 60 países a nivel mundial, con más de 40.000 miembros de personal, incluyendo médicos, enfermeras, obstetras, psicólogos, farmacéuticos, técnicos de laboratorio, administradores y logistas.
MSF es una de las principales organizaciones humanitarias del mundo, y está reconocida por su trabajo en zonas de conflicto, su atención médica a las víctimas de catástrofes naturales, y su lucha contra el SIDA, la tuberculosis, el malaria y otras enfermedades.
MSF se rige por los Principios de Médicos Sin Fronteras, que guían su labor humanitaria. Estos principios establecen que la atención médica es un derecho humano, y que MSF debe actuar en todo momento de manera imparcial e independiente.
Médicos Sin Fronteras defiende el derecho de todas las personas a la salud. Lo hacemos independientemente de su raza, religión, género o orientación política. Hacemos todo lo posible por llegar a los lugares más difíciles para llevar atención médica a aquellos que más lo necesitan. A menudo esto significa desafiar a los gobiernos y a otros poderes. Trabajamos con grupos locales que entienden la situación en la que viven y saben cómo responder de la mejor manera.
Pero el derecho a la salud no se puede defender solo con acceso a la atención médica. También necesitamos abordar las causas profundas de la enfermedad y la violencia. Por eso, nos unimos a otros para exigir que los gobiernos respeten los derechos humanos y cumplan sus compromisos. Y luchamos para que la atención médica esté disponible para todos, sin importar quién o dónde sea.
Médicos Sin Fronteras es una organización humanitaria internacional independiente que ofrece asistencia médica y humanitaria a las víctimas de guerra, conflictos armados y violencia, y a quienes son perseguidos por su religión, raza o orientación sexual. Fundada en 1971, Médicos Sin Fronteras ha brindado atención médica a millones de personas en más de 70 países.
Médicos Sin Fronteras es una organización humanitaria internacional de ayuda médica, fundada en 1971.
Médicos Sin Fronteras trabaja en más de 70 países para prestar asistencia médica a personas que están siendo afectadas por conflictos armados, epidemias, desastres naturales, exclusiones de cuidado médico y violaciones de derechos humanos.
La organización se mantendrá en pie hasta que todas las personas tengan acceso a la atención médica que necesitan, independientemente de dónde viven, de lo que creen o de lo que piensen.
Médicos Sin Fronteras es una organización independiente que se financia íntegramente a través de donaciones de particulares. La organización no acepta dinero de gobiernos, religiosos ni partidos políticos.
Médicos Sin Fronteras es una de las pocas organizaciones humanitarias que está presente en zonas de conflicto, donde la mayoría de las otras organizaciones humanitarias no pueden o no están dispuestas a llegar.
El logotipo de Médicos Sin Fronteras es una cruz roja sobre un fondo blanco. La cruz roja es el símbolo universal de ayuda y protección. El blanco es el color de la pureza, la inocencia y la paz.
El logotipo de Médicos Sin Fronteras es un recordatorio de que la ayuda y la protección deben estar disponibles para todos, independientemente de la guerra, la religión, la raza o la nacionalidad.
Médicos Sin Fronteras (MSF) es una organización humanitaria de ayuda médica fundada en 1971 en Francia por un grupo de médicos y periodistas que querían responder a la emergencia de refugiados en Bangladesh. A lo largo de su historia, MSF ha estado en el lugar de muchos desastres y conflictos armados, brindando atención médica a las víctimas y trabajando para denunciar las violaciones de los derechos humanos. MSF se ha expandido a más de 70 países y cuenta con más de 40.000 voluntarios de todo el mundo.