¿Qué trata el neumólogo?

Un neumólogo es un médico especialista en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades del aparato respiratorio. Estas enfermedades pueden afectar a cualquier parte del aparato respiratorio, desde la nariz hasta los pulmones. El neumólogo puede tratar a pacientes de todas las edades, desde bebés con problemas respiratorios hasta ancianos con enfermedades pulmonares crónicas.

Algunas de las enfermedades que puede tratar el neumólogo son la bronquitis, la bronquiolitis, la neumonía, la tuberculosis, el asma, las alergias y las infecciones respiratorias. También puede tratar a pacientes con enfermedades pulmonares crónicas como el enfisema y la bronquiectasia. En algunos casos, el neumólogo también puede tratar a pacientes con cáncer de pulmón.

El neumólogo realiza una serie de pruebas para diagnosticar la enfermedad del paciente. Estas pruebas pueden incluir una radiografía de tórax, una tomografía axial computarizada (TAC), un escáner pulmonar y una gammagrafía pulmonar. El neumólogo también puede realizar una biopsia pulmonar para obtener una muestra de tejido pulmonar para su análisis.

Una vez que el neumólogo ha diagnosticado la enfermedad, puede prescribir un tratamiento. El tratamiento puede incluir medicamentos, oxígeno, terapia respiratoria o, en algunos casos, cirugía. El neumólogo también puede asesorar a los pacientes y sus familias sobre cómo manejar la enfermedad y qué medidas tomar para prevenir la propagación de la enfermedad.

¿Cuándo es momento de ir a un neumólogo?

Un neumólogo es un médico especializado en el tratamiento de enfermedades del aparato respiratorio. Si usted tiene un problema respiratorio, su médico de atención primaria puede derivarlo a un neumólogo para que lo evalúe y lo trate. Algunas personas con problemas respiratorios crónicos, como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), deben visitar regularmente a un neumólogo. Otros solo necesitan consultarlo cuando tienen una enfermedad respiratoria aguda.

¿En qué consiste una visita al neumólogo? Durante una visita, el neumólogo le hará preguntas sobre sus síntomas y su historia clínica. Le pedirá que describa cómo se siente y cuándo empezaron sus síntomas. Es posible que también le haga preguntas sobre su historia familiar de enfermedades respiratorias y si fuma. Luego, el neumólogo realizará un examen físico. Puede pedirle que sople en un aparato para medir la cantidad de aire que puede inhalar y exhalar. O puede escuchar su corazón y pulmones con un estetoscopio. También puede realizar pruebas de laboratorio y de imagen para diagnosticar su enfermedad.

Si usted tiene un problema respiratorio, su médico de atención primaria puede derivarlo a un neumólogo para que lo evalúe y lo trate. Algunas personas con problemas respiratorios crónicos, como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), deben visitar regularmente a un neumólogo. Otros solo necesitan consultarlo cuando tienen una enfermedad respiratoria aguda.

Los neumólogos también son especialistas en el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades pulmonares ocupacionales. Si usted tiene una enfermedad pulmonar ocupacional, es posible que deba consultar a un neumólogo para que lo evalúe y lo trate. Algunas enfermedades pulmonares ocupacionales pueden ser crónicas y requieren atención médica de por vida. Otros pueden ser agudos y requieren tratamiento inmediato.

¿Cómo saber si tienes algún problema en los pulmones?

Los pulmones son uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, y estar atentos a su salud es vital para mantenernos en forma. A continuación te presentamos algunos síntomas que pueden indicar que tienes algún problema en los pulmones:

  • Tos persistente: una tos que no cede y que dura más de tres semanas puede ser un indicio de que algo no va bien en los pulmones. Si la tos es seca y acompañada de fiebre, dolor de garganta o dificultad para respirar, es mejor acudir al médico inmediatamente.
  • Dolor en el pecho: un dolor continuo o intermitente en el pecho puede ser un síntoma de problemas respiratorios. Si el dolor es muy intenso y/o se acompaña de otros síntomas como fiebre, sudoración, dificultad para respirar o tos, es mejor acudir al médico de inmediato.
  • Dificultad para respirar: si notas que te cuesta respirar, especialmente si haces actividad física, puede ser un indicio de que tienes algún problema en los pulmones. Si la dificultad para respirar es muy intensa o se acompaña de otros síntomas, acude al médico de inmediato.
  • Sibilancias: si sueles tener sibilancias o silbidos al respirar, puede ser un indicio de que tienes algún problema en los pulmones. Si las sibilancias son muy intensas o se acompañan de otros síntomas, acude al médico de inmediato.
  • Respiración rápida o acelerada: si notas que tu respiración es más rápida de lo normal, puede ser un indicio de que tienes algún problema en los pulmones. Si la respiración es muy acelerada o se acompaña de otros síntomas, acude al médico de inmediato.
  • Fatiga: si te sientes muy cansado o sin energía, puede ser un indicio de que tienes algún problema en los pulmones. Si la fatiga es muy intensa o se acompaña de otros síntomas, acude al médico de inmediato.
  • Perdida de peso: si notas que estás perdiendo peso sin hacer dieta ni ejercicio, puede ser un indicio de que tienes algún problema en los pulmones. Si la pérdida de peso es muy rápida o se acompaña de otros síntomas, acude al médico de inmediato.

Si presentas alguno de estos síntomas, es mejor acudir al médico para que te realice una revisión y pueda diagnosticar el problema. No te automediques, ya que algunos medicamentos pueden agravar los síntomas o empeorar el problema. El médico podrá indicarte el tratamiento más adecuado para ti.

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