Un taxi debe tener seguro de daños a terceros, seguro de robo y asalto, seguro de responsabilidad civil y, si el vehículo es nuevo, seguro a todo riesgo.
El seguro de daños a terceros cubre los daños que el taxi pueda causar a otros vehículos, a la propiedad o a las personas. El seguro de robo y asalto cubre los daños causados por el robo o el asalto del vehículo. El seguro de responsabilidad civil cubre los daños causados por el taxi a las personas. El seguro a todo riesgo cubre los daños causados por el taxi a sí mismo, a otras personas o a la propiedad.
El seguro de taxi cubre los daños causados por el vehículo a otras personas y a la propiedad. También cubre los daños causados por el conductor del taxi a otras personas y a la propiedad. El seguro de taxi también cubre a los pasajeros del taxi en caso de accidente.
El seguro de taxi no cubre los daños causados por el conductor del taxi a su propio vehículo o a su propia persona. Tampoco cubre los daños causados por el pasajero del taxi a su propio vehículo o a su propia persona.
En España, todos los vehículos a motor tienen que estar asegurados. Esto incluye coches, motocicletas, autobuses, camiones y carretillas elevadoras. Si no estás seguro de si tu vehículo necesita una póliza de seguro, puedes consultar con tu compañía de seguros. Algunos vehículos, como los tractores y los coches de golf, no necesitan una póliza de seguro, pero es posible que necesiten otro tipo de seguro.
Si tu vehículo no está asegurado y lo usas en la vía pública, estás cometiendo un delito y puedes ser multado. También puedes ser responsable de cualquier daño o lesión que causas a otras personas o a sus propiedades. Si tu vehículo no está asegurado y sufres un accidente, no podrás recibir ninguna indemnización del seguro, incluso si el accidente no fue tu culpa.
Por lo tanto, si tienes un vehículo a motor, asegúrate de que está asegurado. Si no estás seguro de si tu vehículo necesita una póliza de seguro, consulta con tu compañía de seguros. No olvides que, si tu vehículo no está asegurado y lo usas en la vía pública, estás cometiendo un delito.
Un seguro es un contrato mediante el cual una persona (asegurado) se obliga a pagar una prima a una compañía de seguros a cambio de que ésta le brinde una cobertura en caso de sufrir un determinado evento (siniestro), el cual podría ser la muerte, un accidente, un incendio, un robo, entre otros. En otras palabras, el seguro es una forma de protección económica ante una eventualidad.
La prima es el pago que hace el asegurado a la compañía de seguros y sirve para que ésta pueda hacer frente a los eventuales pagos que tenga que hacer en caso de siniestro.
El seguro no es una inversión, sino una forma de protección, ya que el asegurado no recupera la prima que paga, salvo en el caso de algunos seguros de vida, en los que se puede obtener un rendimiento por el dinero asegurado. Lo que sí se recupera en caso de siniestro es la indemnización, que es el pago que hace la compañía de seguros al asegurado.
En España, el seguro de automóvil es obligatorio para todos los vehículos a motor. No obstante, existen algunos vehículos que no requieren de este seguro obligatorio. En este artículo vamos a ver que vehículos no necesitan seguro en España.
Vehículos exentos de seguro
En primer lugar, debemos tener en cuenta que los vehículos de las Fuerzas Armadas y de Seguridad del Estado no requieren de seguro. Tampoco lo requieren los vehículos destinados al transporte de mercancías peligrosas, los vehículos destinados a la extinción de incendios y salvamento, los vehículos usados para el servicio postal, los vehículos de socorro sanitario, los vehículos de protección civil y los vehículos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Asimismo, los vehículos históricos también están exentos de seguro. Se considera vehículo histórico aquel que cumple una serie de requisitos, entre los que se encuentran los siguientes:
Vehículos sin matrícula
Otro grupo de vehículos que no requieren de seguro son los que no tienen matrícula. Se trata de los vehículos que están en proceso de matriculación o de los vehículos que han sido desmatriculados. No obstante, si el vehículo sin matrícula circula por la vía pública, deberá estar asegurado.
En el caso de los vehículos en proceso de matriculación, el seguro deberá cubrir los daños que se puedan producir a terceros durante el tránsito. En el caso de los vehículos desmatriculados, el seguro deberá cubrir los daños a terceros que se puedan producir en el transcurso de una prueba de conducción.
Vehículos en el extranjero
Por último, también debemos tener en cuenta que los vehículos que circulan por el territorio nacional con matrícula extranjera no están obligados a contratar el seguro obligatorio de automóviles. No obstante, si el vehículo tiene matrícula española, deberá estar asegurado.