Los alérgenos son sustancias que provocan una reacción alérgica. La mayoría de las personas no tienen alergia a ninguna sustancia, pero alrededor del 6% de los adultos y el 8% de los niños en los Estados Unidos sí tienen alergias. Las alergias pueden ser leves o graves. Algunas personas pueden tener una reacción alérgica a una sustancia y no saberlo.
Los alérgenos más comunes son los alimentos, el polvo, las picaduras de insectos, las medicinas y las polenes. Algunas personas pueden tener alergias a los animales, el moho o los ácaros del polvo.
Las personas con alergias pueden tener síntomas como ronquera, congestión nasal, estornudos, picazón en la garganta, ojos llorosos y lagrimeo. Algunas personas pueden tener una reacción alérgica en la piel, como enrojecimiento, hinchazón, comezón o erupción. Algunas personas pueden tener una reacción alérgica que afecta el sistema respiratorio, como asma o bronquitis.
La FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos) tiene la responsabilidad de proteger a los consumidores de los alérgenos. La FDA trabaja para garantizar que los alimentos que se venden en los Estados Unidos sean seguros y no contengan alérgenos que puedan causar una reacción alérgica. La FDA también tiene la responsabilidad de supervisar los medicamentos y garantizar que no contengan alérgenos que puedan causar una reacción alérgica.
Si usted tiene una reacción alérgica a un alimento o medicamento, debe buscar tratamiento médico de inmediato. Si usted tiene una reacción alérgica grave, puede necesitar tratamiento de emergencia. Si usted sospecha que tiene una alergia, debe consultar a un alergólogo para hacerse una prueba de alergia.
Un alérgeno es una sustancia que provoca una reacción alérgica. Los alérgenos son proteínas que se encuentran en algunos alimentos, polvo, pelo de animales, espórinx, moho y picaduras de insectos. Las personas alérgicas pueden tener síntomas leves, como una ronquera, o síntomas graves, como un ataque al corazón. Los alérgenos pueden causar síntomas en la piel, como erupción o enrojecimiento, o síntomas en el aparato respiratorio, como asma. También pueden causar síntomas gastrointestinales, como náuseas o diarrea.
Los alérgenos más comunes son los alimentos, como la huevo, el maní, el trigo, el sesamo y el pescado. Otras sustancias que pueden causar alergias son las medicinas, como la penicilina y las vacunas. Algunas personas también pueden ser alérgicas a los animales, como las mascotas y los insectos.
Los alérgenos pueden causar síntomas leves, como una ronquera, o síntomas graves, como un ataque al corazón. También pueden causar síntomas en la piel, como una erupción o enrojecimiento, o síntomas en el aparato respiratorio, como asma. Otras personas pueden tener síntomas gastrointestinales, como náuseas o diarrea. Si usted tiene una reacción alérgica, es importante buscar tratamiento médico de inmediato.
Los alérgenos declarados son aquellos que según la legislación vigente en cada país deben figurar obligatoriamente en la etiqueta de un producto alimentario. En la Unión Europea, la Directiva 2003/89/CE, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 10 de noviembre de 2003, sobre la información al consumidor en materia de alimentos, establece la lista de alérgenos que deben ser declarados por los fabricantes. Los alérgenos son sustancias que pueden provocar alergias alimentarias.
En concreto, la Directiva establece que los alérgenos deben ser declarados por los fabricantes de alimentos si están presentes en los ingredientes de un producto alimentario, o bien si pueden estar presentes en el producto alimentario como consecuencia de un proceso de fabricación, de una transferencia desde un envase o de un uso del envase.
La lista de alérgenos que se deben declarar es la siguiente:
- Cereales que contienen gluten,
- Crustáceos,
- Huevos,
- Pescado,
- Cacahuetes,
- Soja,
- Leche (incluida la lactosa),
- Frutos de cáscara,
- Apio,
- Mostaza,
- Semillas de sésamo,
- Árboles frutales (cítricos, melocotón, albaricoque, ciruela, pera, nectarina, etc.),
- Dientes de león,
- Dióxido de azufre y sulfitos en concentraciones superiores a 10 mg/kg o 10 mg/l en el producto terminado.
La Directiva también establece que los alérgenos deben figurar en la etiqueta de los productos alimentarios ennegrecidos, subrayados, en cursiva o de cualquier otra forma que resalte su presencia, y de forma destacada, clara y comprensible.
La información sobre alérgenos debe figurar junto a la lista de ingredientes, a menos que esta última no figure en la etiqueta. En este caso, la información sobre alérgenos debe figurar en un lugar próximo a la denominación del producto y debe ser igualmente fácilmente visible, legible e inteligente.
Los alérgenos son sustancias que pueden provocar alergias alimentarias. En concreto, la Directiva establece que los alérgenos deben ser declarados por los fabricantes de alimentos si están presentes en los ingredientes de un producto alimentario, o bien si pueden estar presentes en el producto alimentario como consecuencia de un proceso de fabricación, de una transferencia desde un envase o de un uso del envase.La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Federación Internacional de Asociaciones para la Prevención de Alergias Alimentarias (FAAPA) han identificado a los alimentos alérgenos más comunes. En la lista de la OMS se incluyen los siguientes:
Estos alimentos representan alrededor del 90% de todas las reacciones alergia alimentaria. La FAAPA también identifica a los alérgenos más comunes en los alimentos, que son los siguientes:
La FAAPA también señala que el gluten es un alérgeno alimentario en algunos individuos. El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada, el centeno y el avena. Los alérgenos alimentarios son proteínas que el cuerpo identifica como si fueran agentes extraños o peligrosos. Cuando se ingieren alimentos que contienen proteínas alergénicas, el cuerpo produce inmunoglobulinas específicas para atacar esas proteínas. Esto puede provocar una reacción alérgica, que puede ir desde una simple erupción cutánea hasta una reacción anafiláctica grave. Las reacciones alergia alimentaria son cada vez más comunes en todo el mundo. Se estima que alrededor del 4% de la población mundial es alérgica a algún alimento.
Según la Asociación Americana del Asma y los Alergistas, hay aproximadamente 8 millones de adultos y 6 millones de niños en los Estados Unidos que sufren de alergias. Las alergias son una reacción exagerada del sistema inmunológico de nuestro cuerpo al contacto con una sustancia a la que se le conoce como alérgeno. Aunque hay una gran variedad de alérgenos, la mayoría de las alergias se deben a pólenes, ácaros del polvo, caspa de animales, veneno de insectos y alimentos.
El polen es una partícula microscópica que se produce por la fecundación de las plantas. El polen es transportado por el aire y puede causar alergias en las personas que son sensibles a él. El polen de las plantas se produce en diferentes cantidades en diferentes momentos del año, lo que significa que las personas pueden ser alérgicas a diferentes tipos de plantas en diferentes momentos del año.
Los ácaros del polvo son diminutos animales que viven en el polvo de nuestras casas. Aunque son demasiado pequeños para que podamos verlos a simple vista, pueden causar alergias en las personas sensibles a ellos. Los ácaros del polvo se nutren de las partículas de nuestra piel que se desprenden cuando dormimos, por lo que es importante mantener limpia nuestra ropa de cama y nuestras habitaciones para reducir la cantidad de ácaros del polvo.
La caspa de los animales es una sustancia que se produce por la descomposición de las células de la piel de los animales. La caspa de los animales es a menudo un problema para las personas que tienen mascotas, ya que puede ser muy difícil evitar el contacto con ella. Si usted es alérgico a la caspa de los animales, es importante tratar de minimizar el contacto con las mascotas y mantener limpia su casa.
El veneno de los insectos es otra sustancia a la que muchas personas son alérgicas. El veneno de los insectos es producido por las glándulas de veneno de los insectos y puede causar alergias en las personas sensibles a él. El veneno de los insectos es generalmente inyectado en el cuerpo de las personas por las picaduras de los insectos, por lo que es importante tratar de evitar las picaduras de insectos.
Los alimentos son otra fuente común de alergias. Aproximadamente el 2% de los adultos y el 8% de los niños en los Estados Unidos son alérgicos a algunos alimentos. La mayoría de las alergias alimentarias se deben a los frutos secos, huevos, leche, soja, pescado y mariscos. Las alergias alimentarias pueden ser muy peligrosas, por lo que es importante evitar los alimentos a los que se es alérgico y tener siempre un tratamiento de emergencia a mano.