La previsión social es un conjunto de prestaciones y ayudas que tienen por objeto atender a las personas en determinadas situaciones de vulnerabilidad o riesgo. En general, se trata de prestaciones económicas que sirven para proteger a las personas en caso de falta o pérdida de ingresos derivada de contingencias como el desempleo, la maternidad, la enfermedad, la vejez o la invalidez.
La previsión social tiene una función protector y de promoción de la igualdad. Por un lado, busca proteger a las personas en situaciones de vulnerabilidad o riesgo, y por otro, contribuye a reducir las desigualdades entre los ciudadanos.
En España, la previsión social está regulada por la Constitución Española y por la Ley de Seguridad Social. La Constitución Española establece el derecho a la protección social como un derecho fundamental de los ciudadanos, y la Ley de Seguridad Social regula el sistema de prestaciones sociales que se otorga a las personas en situaciones de vulnerabilidad o riesgo.
La previsión social engloba un conjunto de sistemas de protección social que tienen como objetivo aminorar los riesgos a los que están expuestos los trabajadores y sus familias. En la mayoría de los países, estos sistemas están financiados con cotizaciones sociales a cargo de los trabajadores y de sus empleadores, y en algunos casos con fondos del presupuesto general del Estado.
Las partidas que integran la previsión social son:
Las previsiones sirven para predecir el comportamiento de una variable a corto, medio o largo plazo. A menudo, se trata de pronósticos a partir de un modelo, pero también se pueden hacer a partir de la experiencia y el conocimiento de un experto. Las previsiones se pueden hacer para una variedad de áreas, como el clima, la economía, la política o el comportamiento humano.
Para hacer una previsión, se necesita tener en cuenta una serie de factores, como el historial de la variable, las tendencias actuales, los cambios en el entorno y otros factores externos. También se deben tener en cuenta los errores de medición y otros errores aleatorios. Las previsiones se pueden hacer usando una variedad de técnicas, como la regresión, la interpolación, la extrapolación, la simulación o el análisis de redes.
Las previsiones sirven para tomar decisiones en una serie de áreas. Por ejemplo, las empresas pueden usar previsiones para decidir cuánto producir, cuánto invertir en nuevas plantas y equipos, o cuándo expandirse. Los gobiernos pueden usar previsiones para planificar el gasto, la imposición de impuestos y la asignación de recursos. Las previsiones también se pueden usar para tomar decisiones personales, como cuándo comprar una casa o cuándo jubilarse.
La previsión social es una garantía de una pensión para todos aquellos trabajadores que hayan cotizado a lo largo de su vida laboral. El plan de previsión social debe contener los siguientes aspectos:
- Información general sobre el plan de previsión social, como el nombre y logo de la entidad, los objetivos del plan, etc.
- La descripción de los beneficiarios del plan, es decir, aquellas personas que tienen derecho a recibir una pensión por haber cotizado a lo largo de su vida laboral.
- La forma en que se calcula la pensión, es decir, el cálculo de los aportes realizados por el trabajador y los intereses generados.
- Las condiciones que se deben cumplir para acceder a la pensión, como la edad mínima requerida, el número mínimo de años de cotización, etc.
- Las opciones de prestaciones adicionales que ofrece el plan de previsión social, como la prestación por fallecimiento o invalidez.
- La información sobre el proceso de solicitud de la pensión, así como los documentos necesarios para solicitarla.