El Real Decreto 1265/2007, de 21 de diciembre, por el que se establece la ordenación general de las instituciones de crédito, deroga a la NBE CPI 96. La NBE CPI 96 establecía una clasificación de los préstamos y créditos en función de su riesgo de impago. Según esta clasificación, los préstamos y créditos se dividían en tres grandes grupos: préstamos y créditos de primera, segunda y tercera categoría. Los préstamos y créditos de primera categoría eran los de menor riesgo de impago, mientras que los de tercera categoría eran los de mayor riesgo. En el año 2007, se estableció una nueva clasificación de los préstamos y créditos, que se divide en cinco grandes grupos: préstamos y créditos de primera, segunda, tercera, cuarta y quinta categoría. La clasificación de los préstamos y créditos se realiza en función de diversos criterios, tales como el importe del préstamo, el plazo de amortización, el tipo de interés, el perfil del cliente, etc.