Un seguro de Todo riesgo construcción es un tipo de seguro de daños a la propiedad que cubre los daños materiales y directos causados a la estructura de una edificación como resultado de un siniestro cubierto. Estos daños pueden ser causados por una variedad de razones, como el incendio, el agua, el viento, el terremoto, el derrumbe, entre otros. El seguro de Todo riesgo construcción también cubre los daños indirectos a la estructura de la edificación, como los daños causados por el agua u otros elementos que penetran en la edificación a raíz de los daños directos cubiertos.
Este tipo de seguro suele contratarse por las empresas constructoras para proteger sus intereses en caso de que se produzca algún daño a la edificación durante el proceso de construcción. No obstante, también puede contratarse por los propietarios de edificios una vez finalizada la construcción. En este caso, el seguro suele contratarse por un período de tiempo determinado, generalmente de un año, y puede renovarse anualmente.
El seguro de Todo riesgo construcción suele contratarse junto con otros seguros de daños a la propiedad, como el seguro de incendios y el seguro de responsabilidad civil. No obstante, también puede contratarse como un seguro independiente.