¿Qué es un seguro accidentes personales?
Los seguros de accidentes personales son una forma de protección que puede contratarse para cubrir los gastos derivados de un accidente, ya sea en el trabajo, en el hogar o en la vía pública.
En el caso de los accidentes laborales, el seguro cubre los gastos médicos y la pérdida de ingresos derivados del accidente, además de una serie de beneficios adicionales en función de la póliza contratada.
Los accidentes domésticos suelen estar cubiertos por el seguro de hogar, pero en algunos casos es posible contratar un seguro de accidentes personales específico para este tipo de siniestros.
Por último, en el caso de los accidentes de circulación, el seguro de automóvil suele cubrir los gastos derivados del accidente, aunque en algunos casos es posible contratar un seguro de accidentes personales específico para este tipo de siniestros.
¿Qué son seguro de accidentes personales?
Los seguros de accidentes personales protegen a los asegurados de los gastos médicos y de los daños a la propiedad que puedan resultar de lesiones físicas o muerte causadas por un accidente.
Los seguros de accidentes personales también se conocen como seguros de salud y protección contra accidentes. Algunos seguros de accidentes personales también cubren los gastos de reemplazo de ingresos si el asegurado no puede trabajar debido a un accidente.
Los seguros de accidentes personales no están respaldados por el gobierno y no se requieren por ley. Sin embargo, algunas compañías de seguros ofrecen seguros de accidentes personales como parte de un paquete de seguros de salud y/o seguros de vida.
¿Qué coberturas tiene el seguro accidentes personales?
El seguro accidentes personales ofrece una protección adicional en caso de accidente. En concreto, cubre los gastos derivados de la asistencia médica, el tratamiento, la rehabilitación y el fallecimiento, entre otros. Si el asegurado fallece como consecuencia de un accidente, la póliza también cubre los gastos funerales.
Asistencia médica: la póliza cubre los gastos derivados de la asistencia médica, el tratamiento y la rehabilitación, entre otros. Esto incluye la hospitalización, la cirugía, los medicamentos y el transporte sanitario.
Gastos funerales: si el asegurado fallece como consecuencia de un accidente, la póliza también cubre los gastos funerales.
Indemnización por invalidez: en caso de que el asegurado sufra una invalidez permanente como consecuencia de un accidente, la póliza le indemnizará con una suma a determinar en función de la gravedad de la invalidez.
En caso de fallecimiento, la póliza también cubre a los beneficiarios designados por el asegurado. La indemnización se pagará a los beneficiarios en un plazo máximo de 30 días.