Un seguro a primer riesgo es una forma de protección financiera que cubre los daños que una persona puede causar a otra. Si usted es el responsable de los daños, su aseguradora pagará por ellos, hasta el límite de su póliza. Los seguros a primer riesgo son obligatorios en algunos estados para ciertos tipos de vehículos, como automóviles y motocicletas. En otros estados, el seguro a primer riesgo es opcional, pero siempre es una buena idea tenerlo.
Hay varios tipos de seguros a primer riesgo, pero el más común es el seguro de automóvil. El seguro de automóvil cubre los daños que usted pueda causar a otras personas o a sus propiedades con su vehículo. También cubre los daños que usted pueda sufrir si otra persona conduce su vehículo y causa un accidente.
El seguro a primer riesgo no cubre los daños a su propio vehículo. Si desea proteger su vehículo, necesitará obtener un seguro de daños a su vehículo, que es un tipo de seguro opcional.
Si usted es el responsable de los daños causados a otra persona o a su propiedad, su aseguradora pagará por ellos, hasta el límite de su póliza. El límite es el máximo que su aseguradora pagará por los daños. Los límites de seguros a primer riesgo son generalmente más bajos que los de seguros de daños a su vehículo.
Por ejemplo, si usted tiene un seguro de automóvil con un límite de $100,000, su aseguradora pagará hasta $100,000 por los daños que usted cause a otra persona o a su propiedad. Si los daños son mayores, usted será responsable de pagar la diferencia.
Si usted no tiene seguro a primer riesgo y causa un accidente, será responsable de pagar todos los daños que cause. Si no puede pagar, la víctima puede demandarlo y usted podría perder su vehículo, su casa o incluso su trabajo.