La franquicia de un seguro de coche de alquiler es el importe mínimo que usted tendrá que pagar en caso de un accidente. Normalmente, cuanto más alto sea el importe de la franquicia, más barato será el seguro. No obstante, si usted espera ahorrar dinero mediante el uso de una franquicia, es importante asegurarse de que puede permitirse el pago de dicho importe en caso de un accidente.
Algunas compañías de alquiler de coches ofrecen un seguro con franquicia, por lo que si usted es el responsable de un accidente, solo tendrá que pagar la franquicia. Sin embargo, esto significa que usted asumirá el riesgo de pagar todos los demás gastos en caso de un accidente grave. Por esta razón, es importante asegurarse de que tiene una buena idea de cuánto le costará el seguro antes de optar por esta opción.
Otra opción es contratar un seguro de coche de alquiler con una franquicia reducida o sin franquicia. Esto significa que usted será el responsable de pagar una parte de los daños en caso de un accidente, pero no tendrá que pagar todos los gastos. Esta es una buena opción si usted no está seguro de cuánto le costará el seguro y no quiere asumir el riesgo de pagar todos los gastos en caso de un accidente grave.
La franquicia de 200 euros es una franquicia con una tarifa muy baja que se ofrece a los clientes. Se trata de una tarifa plana que se aplica a todos los clientes, independientemente de su país de origen o de su destino. La franquicia de 200 euros se ofrece a los clientes que viajan a Europa, Oriente Medio y África.
La franquicia de 200 euros es una tarifa muy baja que se ofrece a los clientes. Se trata de una tarifa plana que se aplica a todos los clientes, independientemente de su país de origen o de su destino. La franquicia de 200 euros se ofrece a los clientes que viajan a Europa, Oriente Medio y África.
La franquicia de 600 euros es una opción que ofrecen algunas aseguradoras a sus clientes para que puedan ahorrar en el pago de la prima. Se trata de una franquicia a pagar por el asegurado en caso de siniestro, de forma que el importe de la prima se reduce. Esta opción puede ser interesante para aquellos asegurados que no suelen tener siniestros y que quieren ahorrar en el pago de la prima.
No obstante, hay que tener en cuenta que, en caso de siniestro, el asegurado tendrá que pagar la franquicia de 600 euros, por lo que es importante que se tenga en cuenta esta circunstancia a la hora de contratar un seguro.