El seguro decenal autopromotor es una póliza obligatoria para todos los constructores y promotores inmobiliarios que desarrollan su actividad en España. Esta modalidad de seguro asegura los defectos de construcción que puedan surgir en una obra durante un periodo de 10 años a partir de la finalización de la misma.
La cobertura del seguro decenal autopromotor es amplia, y abarca todos los daños que se puedan producir en la edificación a consecuencia de vicios o defectos en la construcción. Se trata de una póliza a todo riesgo, por lo que no es necesario especificar ni declarar los daños y defectos que se quieren cubrir.
El seguro decenal autopromotor es una garantía a favor de los compradores de viviendas, y también de los inquilinos de locales comerciales, oficinas u otros inmuebles, que podrán hacer uso de ella en caso de detectar vicios ocultos en la construcción de su edificación.
El seguro decenal autopromotor no solo cubre los daños que se produzcan en la edificación, sino también los gastos que se generen para subsanarlos. Así, el asegurado no tendrá que hacer frente a los costes de reparación de los daños, sino que será la compañía aseguradora la que se haga cargo de todos los gastos.
Para contratar un seguro decenal autopromotor, es necesario que el promotor o constructor esté inscrito en el Registro de Empresas de Actividades de Promoción Inmobiliaria y Actividades Auxiliares de la Edificación (REAE), ya que solo están obligados a contratar este tipo de seguros las empresas que figuren en este registro.
El seguro decenal es una póliza de seguro obligatoria para todos los constructores que intervienen en la ejecución de una obra de construcción, según lo establecido en el Real Decreto 1065/2007, de 27 de julio.
Esta póliza tiene como objetivo cubrir los daños que se puedan producir en la obra durante el decenio siguiente a su finalización, y que puedan afectar a la estructura, la estabilidad y la seguridad de la misma.
La responsabilidad del seguro decenal recae sobre el constructor de la obra, ya que es él quien debe contratar este seguro con una compañía aseguradora. No obstante, en algunos casos especiales, como en el de las promotoras o las constructoras, también pueden estar obligadas a contratar este seguro.
En el caso de las promotoras, están obligadas a contratar el seguro decenal si la obra es de su propiedad y van a venderla antes de que finalice el decenio. Por su parte, las constructoras están obligadas a contratar este seguro cuando se trata de obras ajenas y su contrato así lo establezca.
En cualquier caso, el contrato de seguro debe estar en vigor desde el inicio de la obra y hasta la finalización del decenio.
El importe a asegurar debe ser suficiente para cubrir los daños que se puedan producir en la obra, sin embargo, el importe mínimo que se debe asegurar es de 600.000 euros.
En el caso de que la obra se realice en fases, el importe a asegurar debe ser suficiente para cubrir los daños de todas las fases de la obra.
Por último, cabe destacar que el seguro decenal no cubre los daños que se puedan producir en la obra por negligencia o mala praxis del constructor.
Según el artículo 16 de la Ley 38/1999, de 5 de noviembre, sobre Contrato de Seguro, los contratos de seguro de obras y servicios de construcción deberán estar cubiertos por un seguro de responsabilidad civil profesional, también conocido como seguro decenal. Este seguro de responsabilidad civil profesional es obligatorio para cualquier contratista, tanto si es una persona física como si es una persona jurídica, que realice contratos de construcción.
La responsabilidad civil profesional es la responsabilidad que surge del ejercicio profesional de la actividad de construcción y que es cubierta por el seguro de responsabilidad civil profesional. El seguro de responsabilidad civil profesional es un seguro que garantiza el cumplimiento de las obligaciones que el contratista adquiere frente a terceros con ocasión del contrato de construcción que ha realizado. Estas obligaciones pueden derivar, por ejemplo, de los daños materiales que se produzcan en la obra durante su ejecución o de los daños personales que sufran las personas que intervengan en la misma.
Así, el seguro de responsabilidad civil profesional es un seguro de daños que cubre los daños materiales y los daños personales que se produzcan en la obra durante su ejecución. No obstante, el seguro de responsabilidad civil profesional no cubre los daños que se produzcan una vez que la obra ha sido entregada al cliente y ha sido puesta en marcha, ya que estos daños serán cubiertos por el seguro de responsabilidad civil contractual.
Por lo tanto, el seguro de responsabilidad civil profesional es obligatorio para todo contratista que realice contratos de construcción, ya que es el único medio por el que se pueden cubrir los daños que se produzcan en la obra durante su ejecución. No obstante, el contratista debe asegurarse de que el seguro de responsabilidad civil profesional cubra todos los riesgos a los que está expuesta la obra durante su ejecución.
El seguro decenal de la construcción es un seguro obligatorio para todas las obras de construcción nuevas o rehabilitadas, que cubre los daños materiales y personales causados por defectos estructurales de la obra. Este seguro debe contratarse antes de comenzar la obra y estar vigente durante todo el periodo de ejecución de la misma, así como los 10 años siguientes a la finalización de la obra, a partir de la fecha de recepción provisionalidad.
El seguro decenal de la construcción cubre los daños materiales y personales causados por defectos estructurales de la obra, tales como fisuras, derrumbes y roturas de elementos estructurales. Asimismo, cubre los daños causados por el agua, como las inundaciones o el daño por humedad, así como los daños eléctricos causados por fallas en el sistema eléctrico de la obra. También cubre los daños causados por el incendio, aunque no cubre los daños causados por el robo o la vandalismo.
El seguro decenal de la construcción no cubre los daños que sean consecuencia de la falta de mantenimiento de la obra, ni los daños causados por el mal uso de la misma. Asimismo, no cubre los daños estéticos o superficiales, ni los daños causados por fenómenos naturales, como el terremoto o el huracán.
La OCT (Optical Coherence Tomography) es una técnica de imagen médica que se utiliza para obtener imágenes detalladas de las estructuras internas de los ojos. La OCT es una herramienta muy útil para el diagnóstico y el seguimiento de diversas enfermedades oculares, como la degeneración macular, la retinopatía diabética o el edema macular. La OCT también se utiliza para evaluar la estructura de la retina antes y después de la cirugía de cataratas.
La OCT es una técnica de imagen médica que se utiliza para obtener imágenes detalladas de las estructuras internas de los ojos. La OCT es una herramienta muy útil para el diagnóstico y el seguimiento de diversas enfermedades oculares, como la degeneración macular, la retinopatía diabética o el edema macular. La OCT también se utiliza para evaluar la estructura de la retina antes y después de la cirugía de cataratas.