La póliza de Todo riesgo construcción cubre los daños materiales y directos causados a la propiedad asegurada como consecuencia de un siniestro, en los términos y condiciones establecidos en la póliza. Asimismo, esta póliza cubre los daños derivados de la paralización de la obra, así como los lucros cesantes que se deriven de ella.
Los seguros de Todo riesgo construcción suelen contratarse para cubrir una serie de riesgos específicos, tales como: incendio, explosión, derrumbes, terremotos, huracanes, inundaciones, daños eléctricos, entre otros. No obstante, cada aseguradora ofrece una cobertura diferente, por lo que es importante que el propietario o constructor revise cuáles son los riesgos que están cubiertos por la póliza que ha contratado.
En algunos casos, los seguros de Todo riesgo construcción pueden contratarse para cubrir una obra en particular o un conjunto de obras. Asimismo, existen pólizas que cubren los daños a la propiedad durante el periodo de construcción, así como una vez que la obra esté terminada.
Una póliza de seguro es un contrato por el cual una compañía de seguros se compromete a cubrir a una persona o entidad contra un riesgo específico, a cambio de una prima. Las pólizas de seguros suelen utilizarse para cubrir riesgos como los daños a la propiedad, accidentes, enfermedades o fallecimiento. En algunos casos, las pólizas de seguros también pueden ser utilizadas como una forma de inversión o ahorro, asegurando una suma de dinero para un evento futuro, como la jubilación. Las pólizas de seguros se rigen por un contrato, que especifica los términos y condiciones de la coverage.It es importante leer el contrato de seguros cuidadosamente para comprender qué está cubierto y cuáles son las exclusiones. Las pólizas de seguros también suelen incluir una cláusula de rescisión, que permite a la compañía de seguros cancelar la póliza en cualquier momento y por cualquier motivo. No obstante, las compañías de seguros tienen que proporcionar un aviso por escrito de su intención de cancelar la póliza, y en algunos casos, una indemnización por la cancelación.
Los seguros de edificios cubren los daños causados a la estructura del edificio como consecuencia de un siniestro. En la mayoría de los casos, el seguro no cubre el contenido del edificio, sino solo la estructura. Si el propietario del edificio desea proteger el contenido, debe contratar un seguro de contenido adicional. Algunos seguros de edificio también cubren los daños causados por el agua, como el daño causado por la inundación o el derrame de agua.
Los seguros de edificio generalmente cubren los siguientes riesgos:
Los seguros de edificio generalmente no cubren los siguientes riesgos:
Una póliza de seguro que cubre a una persona física o jurídica contra más de un riesgo se denomina póliza multirriesgo o póliza de riesgos múltiples. Así, una póliza de este tipo protege al asegurado frente a una serie de eventualidades que, de otra forma, tendría que contratar por separado.
En la mayoría de los casos, se trata de una póliza de seguros de hogar que, además de cubrir los daños derivados de incendios, robos o inundaciones, asegura también los daños que puedan producirse en el interior de la vivienda, como por ejemplo, los daños causados por agua, roturas de cañerías, etc.
Otras pólizas multirriesgo pueden ser, por ejemplo, las pólizas de seguros de automóviles o las pólizas de seguros de vida, que protegen al asegurado frente a una serie de eventualidades.
En cualquier caso, se trata de una modalidad de seguros muy conveniente para el asegurado, ya que le permite contratar un único seguro que le proteja frente a una serie de riesgos, por un precio mucho más bajo que si los contratara por separado.