El seguro de defensa jurídica cubre los gastos de un abogado y de un procurador en el caso de que tengas que ir a juicio. No obstante, en la mayoría de los casos, el asegurado no tiene que pagar nada porque el abogado lo defiende de forma gratuita. Si el asegurado no tiene abogado, el seguro le pagará los gastos de uno de forma gratuita.
Por lo general, el seguro de defensa jurídica también cubre los gastos de un perito o de un traductor, si es necesario. También cubre los gastos de los testigos, si es necesario. Si el asegurado gana el juicio, el seguro le pagará los gastos de los abogados y de los procuradores. Si el asegurado pierde el juicio, el seguro le pagará los gastos de los abogados y de los procuradores, si el asegurado lo solicita.
El seguro de defensa jurídica suele cubrir todos los gastos de un juicio, incluyendo los gastos de los abogados, de los procuradores, de los peritos, de los traductores, de los testigos y de los gastos de viaje. Sin embargo, algunos seguros no cubren los gastos de los abogados si el asegurado pierde el juicio.
El seguro de defensa jurídica también suele cubrir los gastos de un arbitraje o de una mediación, si es necesario. También cubre los gastos de un juicio de divorcio, si es necesario. Sin embargo, algunos seguros no cubren los gastos de los abogados si el asegurado pierde el juicio.
La defensa jurídica de un seguro normalmente cubre los costes de un abogado y de un procurador, así como los gastos de los tribunales y cualquier indemnización a la que pueda tener derecho. Si bien los seguros de defensa jurídica varían en cuanto a lo que cubren, la mayoría de ellos cubren una amplia gama de asuntos legales, como los divorcios, las disputas de propiedad, las demandas por accidentes y las defensas penales.
La mayoría de los seguros de defensa jurídica cuentan con un límite de cobertura, lo que significa que solo están dispuestos a pagar hasta cierto importe por un abogado o un procurador. Si el coste de su abogado excede el límite de cobertura de su seguro, tendrá que pagar el exceso de su bolsillo.
Algunos seguros de defensa jurídica también tienen franjas horarias, lo que significa que solo están dispuestos a pagar una cantidad específica por hora de trabajo de abogado. Si el abogado de su selección cobra más de la franja horaria de su seguro, tendrá que pagar la diferencia.
Algunos seguros de defensa jurídica también tienen franjas de edad, lo que significa que solo están dispuestos a pagar una cantidad específica por abogados de cierta edad. Si el abogado de su selección es más joven o más viejo que la franja de edad de su seguro, tendrá que pagar la diferencia.