La cuenta 759 se usa para registrar los gastos de capital. Los gastos de capital son los costos que se incurren para adquirir o mejorar un activo fijo. Estos costos se deben registrar como un activo en el balance general, ya que representan un beneficio futuro para la empresa. La cuenta 759 se usa para registrar el costo total del activo fijo, incluidos los costos de instalación y puesta en marcha.
La cuenta 769 se refiere a los gastos de investigación y desarrollo. Esta cuenta contiene los costos asociados con el diseño, la prueba y la evaluación de nuevos productos y procesos. La cuenta 769 también se utiliza para registrar los costos de mejora de los productos y procesos existentes.
La cuenta 755 se utiliza para registrar los gastos de venta, generalmente representa los costos de mano de obra, materiales y gastos generales asociados con la venta de un producto. En algunos casos, la cuenta 755 se puede usar para registrar los costos de venta de un servicio. La cuenta 755 se clasifica como una cuenta de costo de venta en el estado de resultados.
La cuenta 755 se utiliza en conjunción con otras cuentas de costos de venta para registrar los costos totales asociados con la venta de un producto o servicio. Estas cuentas de costos de venta se utilizan para registrar los costos de mano de obra, materiales, gastos generales y otros costos asociados con la venta de un producto o servicio. Las cuentas de costos de venta se utilizan para determinar el costo de venta de un producto o servicio.
El costo de venta de un producto o servicio se utiliza para determinar el precio de venta de un producto o servicio. El precio de venta de un producto o servicio se utiliza para determinar la utilidad de un producto o servicio. La utilidad de un producto o servicio se utiliza para determinar el ingreso de una empresa.
La cuenta 705 se usa en el balance general para registrar los gastos de venta. En la mayoría de los casos, la cuenta 705 se usa para registrar los costos de envío y manipulación de los productos que se venden.
Los ingresos son uno de los factores más importantes para una empresa. La forma en que se registran y se llevan los ingresos puede determinar el éxito o el fracaso de la empresa. Es por eso que es importante comprender cómo se registran los ingresos.
Los ingresos se registran como un aumento en el patrimonio neto de la empresa. Esto se debe a que los ingresos son un aumento en los activos o un decremento en los pasivos de la empresa. Los ingresos se registran en el estado de resultados de la empresa. El estado de resultados es un estado financiero que muestra el resultado de las operaciones de la empresa durante un periodo determinado. El estado de resultados se compone de tres secciones: ingresos, gastos e impuestos. La sección de ingresos muestra todos los ingresos de la empresa durante el periodo, mientras que la sección de gastos muestra todos los gastos de la empresa durante el periodo. La sección de impuestos muestra el impuesto sobre la renta de la empresa.
Los ingresos se clasifican en dos categorías: ingresos operacionales y ingresos no operacionales. Los ingresos operacionales se generan directamente de las actividades de la empresa. Por ejemplo, si la empresa es una tienda, los ingresos operacionales serán los ingresos generados por la venta de los productos. Los ingresos no operacionales se generan indirectamente de las actividades de la empresa. Por ejemplo, si la empresa es una tienda, los ingresos no operacionales serán los ingresos generados por la venta de acciones o bonos.
Los ingresos se registran en el estado de resultados de la empresa. El estado de resultados es un estado financiero que muestra el resultado de las operaciones de la empresa durante un periodo determinado. El estado de resultados se compone de tres secciones: ingresos, gastos e impuestos. La sección de ingresos muestra todos los ingresos de la empresa durante el periodo, mientras que la sección de gastos muestra todos los gastos de la empresa durante el periodo. La sección de impuestos muestra el impuesto sobre la renta de la empresa.
Los ingresos se clasifican en dos categorías: ingresos operacionales y ingresos no operacionales. Los ingresos operacionales se generan directamente de las actividades de la empresa. Por ejemplo, si la empresa es una tienda, los ingresos operacionales serán los ingresos generados por la venta de los productos. Los ingresos no operacionales se generan indirectamente de las actividades de la empresa. Por ejemplo, si la empresa es una tienda, los ingresos no operacionales serán los ingresos generados por la venta de acciones o bonos.