La otitis es una infección de la oreja que puede ser bacteriana o virósica. Es muy frecuente en niños y en adultos, y suele estar precedida de gripe o resfriado. En ocasiones, las otitis pueden ser muy dolorosas y requerir tratamiento médico.
En la mayoría de los casos, las otitis son agudas y curan sin complicaciones en un plazo de una a tres semanas. No obstante, cuando las otitis son crónicas o recurrentes, es posible que sean síntoma de otra enfermedad más grave, como una alergia o un trastorno del sistema inmunológico.
En cualquier caso, si tienes fiebre o dolor de oído intenso, es recomendable que acudas a tu médico de cabecera o a un otorrinolaringólogo (ORL) para que te realicen un diagnóstico y te prescriban el tratamiento adecuado.
Los problemas en la nariz y en los oídos son muy comunes, y muchas veces podemos resolverlos con remedios caseros o medicamentos que podemos encontrar en la farmacia. Pero, ¿cuándo debemos acudir al otorrinolaringólogo?
Para saber si debes de acudir al médico especialista, te recomendamos que leas este artículo. En él, te explicaremos cuándo es necesario acudir al otorrino, así como los síntomas que debes tener en cuenta.
Los problemas de nariz y de oídos pueden deberse a diversas causas. Algunas de ellas son muy comunes y no requieren tratamiento especializado, como puede ser un resfriado o una alergia. Pero otras pueden ser síntomas de enfermedades más graves, y requerir el tratamiento de un especialista.
En el primer caso, suele bastar con remedios caseros o medicamentos de venta libre. Pero, en el segundo caso, es necesario acudir al otorrino para recibir el tratamiento adecuado.
A continuación, te enumeramos los principales síntomas que debes tener en cuenta para saber si debes acudir al otorrino:
Si tienes cualquiera de estos síntomas, o si los remedios caseros o los medicamentos de venta libre no te han funcionado, es posible que debas acudir al otorrino. El médico especialista te diagnosticará correctamente y te recetará el tratamiento adecuado.
Los otorrinolaringólogos son médicos especializados en el cuidado de las enfermedades de la cabeza, el cuello, los oídos, la nariz y la garganta. Según la Asociación Americana de Otorrinolaringología, el otorrinolaringólogo trata aproximadamente 44 millones de pacientes al año.
Los otorrinolaringólogos se especializan en el diagnóstico y tratamiento de una amplia variedad de enfermedades, que van desde las infecciones del oído hasta la cirugía de la cabeza y el cuello. A continuación se presentan algunas de las enfermedades que pueden diagnosticar y tratar los otorrinolaringólogos.
Los otorrinolaringólogos se especializan en el diagnóstico y tratamiento de las infecciones del oído, la sordera y otras enfermedades del oído. Las infecciones del oído pueden ser bacterianas o virales y pueden afectar a cualquier persona en cualquier edad. La sordera puede ser congénita o adquirida y puede ser causada por una variedad de factores, incluidas las infecciones del oído, los traumatismos, la exposición a ruidos fuertes y el envejecimiento.
Los otorrinolaringólogos también se especializan en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de la nariz. Las enfermedades de la nariz pueden ser congénitas o adquiridas, y pueden afectar a cualquier persona en cualquier edad. Las enfermedades de la nariz pueden incluir rinitis, sinusitis, rinitis alérgica y tumores nasales. La rinitis es una enfermedad muy común que se caracteriza por secreción nasal, congestión nasal, dolor de cabeza y dolor de garganta. La sinusitis es una inflamación de los senos paranasales que puede causar dolor de cabeza, congestión nasal, dolor de garganta y fiebre. La rinitis alérgica es una enfermedad que se caracteriza por secreción nasal, congestión nasal, dolor de cabeza, dolor de garganta y estornudos. Los tumores nasales son crecimientos anormales de tejido que pueden causar obstrucción nasal, dolor de cabeza y pérdida de olfato.
Los otorrinolaringólogos también se especializan en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de la garganta. Las enfermedades de la garganta pueden ser congénitas o adquiridas, y pueden afectar a cualquier persona en cualquier edad. Las enfermedades de la garganta pueden incluir amigdalitis, faringitis, laringitis y tumores de la garganta. La amigdalitis es una inflamación de las amígdalas que puede causar dolor de garganta, fiebre, dolor de cabeza y malestar general. La faringitis es una inflamación de la faringe que puede causar dolor de garganta, dificultad para tragar y dolor de oído. La laringitis es una inflamación de la laringe que puede causar dificultad para respirar, dolor de garganta, tos y ronquera. Los tumores de la garganta son crecimientos anormales de tejido que pueden causar dificultad para tragar, dolor de garganta y dificultad para respirar.
Los otorrinolaringólogos son médicos especializados en el cuidado de las enfermedades de la cabeza, el cuello, los oídos, la nariz y la garganta. Según la Asociación Americana de Otorrinolaringología, el otorrinolaringólogo trata aproximadamente 44 millones de pacientes al año. Los otorrinolaringólogos se especializan en el diagnóstico y tratamiento de una amplia variedad de enfermedades, que van desde las infecciones del oído hasta la cirugía de la cabeza y el cuello. A continuación se presentan algunas de las enfermedades que pueden diagnosticar y tratar los otorrinolaringólogos.
Los otorrinolaringólogos (también conocidos como otorrinos) son médicos especializados en el diagnóstico y tratamiento de problemas en la cabeza, cuello y orejas. Están capacitados para diagnosticar y tratar afecciones de la nariz, garganta, oidos y cabeza. Los otorrinos también pueden realizar cirugía de las amígdalas, adenoides y senos paranasales.
Los otorrinolaringólogos son médicos especializados en el diagnóstico y tratamiento de problemas en la cabeza, cuello y orejas. Están capacitados para diagnosticar y tratar afecciones de la nariz, garganta, oidos y cabeza. Los otorrinolaringólogos también pueden realizar cirugía de las amígdalas, adenoides y senos paranasales.
El examen del oído es una parte esencial de la evaluación otológica. El médico puede detectar problemas en el conducto auditivo, el tímpano y el oído medio. En el consultorio, el médico generalmente usa un otoendoscopio para examinar el conducto auditivo. El otoendoscopio es un instrumento que se inserta en el oído y que permite al médico examinar el conducto auditivo, el tímpano y el oído medio. También se puede usar un microscopio otoscópico para examinar el oído. El microscopio otoscópico es un instrumento que se usa para examinar el conducto auditivo y el tímpano. En algunos casos, el médico puede necesitar usar un oftalmoscopio para examinar el oído. El oftalmoscopio es un instrumento que se usa para examinar el oído medio.
La audiometría es una prueba que se realiza para medir la capacidad de la persona para escuchar. En la audiometría, se usan unos audífonos para emitir un sonido en un oído a la vez. La persona que realiza la prueba le dice al paciente cuándo y cuánto tiene que responder. La audiometría se puede realizar en un consultorio médico o en un audífono. En algunos casos, el médico puede necesitar usar un estetoscopio para examinar el oído. El estetoscopio es un instrumento que se usa para escuchar los ruidos del oído.
La impedancia audiometría es una prueba que se realiza para medir la capacidad de la persona para escuchar. En la impedancia audiometría, se usan unos audífonos para emitir un sonido en un oído a la vez. La persona que realiza la prueba le dice al paciente cuándo y cuánto tiene que responder. La impedancia audiometría se puede realizar en un consultorio médico o en un audífono. En algunos casos, el médico puede necesitar usar un estetoscopio para examinar el oído. El estetoscopio es un instrumento que se usa para escuchar los ruidos del oído.
La potencia auditiva es una prueba que se realiza para medir la capacidad de la persona para escuchar. En la potencia auditiva, se usan unos audífonos para emitir un sonido en un oído a la vez. La persona que realiza la prueba le dice al paciente cuándo y cuánto tiene que responder. La potencia auditiva se puede realizar en un consultorio médico o en un audífono. En algunos casos, el médico puede necesitar usar un estetoscopio para examinar el oído. El estetoscopio es un instrumento que se usa para escuchar los ruidos del oído.