¿Cuáles son las compensaciones variables?

Las compensaciones variables son aquellas que no se pagan fijamente y dependen de un sistema de incentivos. Estas se ofrecen a los empleados en función de su desempeño y pueden ser en forma de bonificaciones, comisiones, o acciones. Las compensaciones variables representan una parte importante de la remuneración total de un empleado y pueden ser una herramienta muy efectiva para motivar y retener el talento. Al ofrecer estos incentivos, las empresas pueden aumentar la productividad y el rendimiento de sus empleados.

Las compensaciones variables pueden ser una gran motivación para los empleados, ya que les permite ganar más dinero en función de su desempeño. Esto puede ser muy atractivo para los empleados que están dispuestos a trabajar duro y poner el extra para lograr los objetivos de la empresa. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos incentivos deben establecerse de manera clara y precisa, de lo contrario pueden crear confusión y frustración entre los empleados.

En general, las compensaciones variables pueden ser una gran manera de motivar a los empleados y mejorar el rendimiento de la empresa. Sin embargo, es importante asegurarse de que estos incentivos estén establecidos de manera clara y precisa para evitar cualquier confusión o frustración entre los empleados.

¿Qué es compensación fija y variable?

La compensación fija es una suma de dinero que se paga a un empleado independientemente de su rendimiento. Se trata de un pago periódico, como un sueldo semanal o mensual, que se acordó en el momento en que se firmó el contrato de trabajo. La compensación variable, por otro lado, es una suma de dinero que se paga a un empleado en función de su rendimiento. Por ejemplo, una empresa puede pagar a un vendedor una comisión por cada producto que vende. En otras palabras, la compensación variable es una forma de pago "por resultados".

La mayoría de los puestos de trabajo combinan una compensación fija y variable. Por ejemplo, un vendedor puede recibir un salario fijo mensual, más una comisión variable por cada producto que vende. De esta forma, la empresa puede asegurarse de que el empleado reciba una cierta cantidad de dinero en base a su presencia en el trabajo, mientras que también se le motiva a realizar ventas.

En general, se espera que los empleados con una compensación variable ganen más dinero que aquellos con una compensación fija, ya que están siendo recompensados ??por su rendimiento. Sin embargo, también existe el riesgo de que no se gane nada en absoluto, lo que puede ser un problema para aquellos que dependen del dinero para pagar sus facturas. Por esta razón, muchas personas prefieren una compensación fija, ya que sabe exactamente cuánto dinero recibirá cada mes.

¿Cómo se calcula la compensación variable?

La compensación variable es una forma de pago a los empleados que está directamente relacionada con el desempeño y los resultados de la empresa. A diferencia de un salario fijo, que es un pago establecido por adelantado independientemente del rendimiento, la compensación variable está basada en el desempeño y puede aumentar o disminuir dependiendo de los resultados de la empresa.

La compensación variable puede tomar varias formas, incluyendo bonos, participación en los beneficios, acciones de la empresa y otros incentivos. A menudo, se calcula utilizando una fórmula predeterminada que toma en cuenta el rendimiento individual y de la empresa. Sin embargo, el método exacto de cálculo puede variar según la empresa y el puesto de trabajo.

¿Qué tipos de compensaciones hay?

En general, las compensaciones se pueden dividir en dos grandes grupos: compensaciones monetarias y compensaciones no monetarias. Las compensaciones monetarias son las que se expresan en dinero, mientras que las compensaciones no monetarias son todas aquellas otras formas de compensación que no tienen un valor monetario directo. Aunque las compensaciones no monetarias no se pueden medir con tanta precisión como las monetarias, su importancia no debe subestimarse. En muchos casos, las compensaciones no monetarias son más valiosas para los empleados que las monetarias.

Algunos ejemplos de compensaciones monetarias son el salario, los bonos, las comisiones y los beneficios monetarios (como los subsidios para el transporte o la asistencia sanitaria).

Algunos ejemplos de compensaciones no monetarias son el tiempo libre (como los días de vacaciones), los beneficios no monetarios (como los subsidios para el transporte o la asistencia sanitaria), los beneficios en especie (como el alquiler de una casa o el uso de un coche), los programas de formación y los servicios de asesoría.