La sanidad pública en Portugal está gestionada por el Servicio Nacional de Salud (SNS), que se encarga de proveer a todos los ciudadanos de atención médica gratuita o de bajo costo. Las personas que no están cubiertas por el SNS pueden optar por adquirir un seguro privado de salud.
El SNS está financiado principalmente por impuestos, tasas y contribuciones de los trabajadores, y cuenta con un presupuesto anual de más de 9 mil millones de euros. Aproximadamente el 80% de este presupuesto se destina a la atención médica primaria y el 20% restante se utiliza para la atención médica especializada y hospitalaria.
El SNS está compuesto por una red de más de 1.700 establecimientos de salud, que incluyen centros de salud, hospitales, clínicas especializadas y otros servicios de salud. Todos los establecimientos de salud del SNS están abiertos al público y se puede acceder a ellos mediante el sistema de cita previa.
Para acceder a la atención médica en el SNS, los ciudadanos portugueses deben estar registrados en el sistema y presentar su Tarjeta de Identidad de Ciudadano (TIC). Los extranjeros que no son ciudadanos de la Unión Europea (UE) deben estar en posesión de un permiso de residencia válido para Portugal. Los ciudadanos de la UE que no sean portugueses deben presentar su Tarjeta de Identificación de Ciudadano de la UE o su Tarjeta de Residencia de Familiar de Ciudadano de la UE.
El SNS proporciona una amplia gama de servicios de salud, que incluyen atención médica primaria, atención médica especializada, hospitalización, cuidados de salud mental, cuidados dentales, cuidados farmacéuticos y cuidados de salud para personas con discapacidad.
Los ciudadanos portugueses también tienen acceso a una serie de prestaciones sociales, como la prestación por enfermedad, la prestación por maternidad, la prestación por paternidad, la prestación por invalidez y la prestación por vejez. Todas estas prestaciones sociales están cubiertas por el SNS.
La atención médica en Portugal es de alta calidad pero, ¿cuánto cuesta? En general, los costos de la atención médica son más bajos que en otros países de Europa occidental, pero aún así pueden ser altos para algunos residentes. A continuación se detallan los costos de algunos servicios médicos en Portugal.
Una consulta médica general en Portugal puede costar entre 25 y 50 euros. Los médicos especialistas pueden cobrar hasta 100 euros por consulta. Algunos médicos ofrecen descuentos para consultas por teléfono o por internet. Si se necesita una traducción durante la consulta, el costo puede aumentar.
Los costos de los exámenes médicos dependen del tipo de examen. Un examen de sangre general puede costar entre 10 y 30 euros, mientras que una radiografía puede costar entre 30 y 60 euros. Los exámenes más costosos, como las tomografías, pueden costar más de 100 euros.
La hospitalización en Portugal puede costar entre 100 y 200 euros por día. Los costos de los tratamientos, como la cirugía, dependen del tipo de tratamiento. Algunos tratamientos, como la quimioterapia, pueden costar más de 1.000 euros.
Los medicamentos recetados en Portugal pueden costar entre 10 y 100 euros, dependiendo del medicamento. Los medicamentos sin receta pueden costar entre 5 y 25 euros. Algunos medicamentos están disponibles gratis para algunos pacientes, como los niños, los ancianos y las personas con bajos ingresos.
Si te pones enfermo en Portugal, hay una serie de pasos que puedes seguir para recibir atención médica. En primer lugar, deberás tratar de encontrar un médico de cabecera. Estos médicos son médicos generales que pueden diagnosticar y tratar una amplia variedad de enfermedades y condiciones. Si no puedes encontrar un médico de cabecera, puedes visitar una clínica de salud pública. Las clínicas de salud pública son gratuitas para los ciudadanos portugueses y los residentes permanentes. Sin embargo, pueden cobrar a los turistas y los visitantes. Si necesitas atención médica urgente, puedes visitar un hospital. En Portugal, hay una amplia red de hospitales públicos y privados. Los hospitales públicos son gratuitos para los ciudadanos portugueses y los residentes permanentes. Sin embargo, pueden cobrar a los turistas y los visitantes. Si no puedes pagar la atención médica, puedes solicitar una exención de pago. Para hacer esto, deberás presentar una solicitud y una prueba de que no tienes los medios para pagar la atención médica.
Portugal es un país de la Unión Europea con un sistema de salud pública de calidad. A diferencia de otros países de la UE, no es necesario ser ciudadano portugués para acceder al sistema de salud.
Para acceder a la atención médica gratuita o a un precio muy reducido, basta con tener una tarjeta de la Seguridad Social. Esta tarjeta se puede solicitar a la Seguridad Social portuguesa si se dispone de un contrato de trabajo o de un permiso de residencia válidos.
En Portugal, el sistema de salud está financiado con impuestos. Los ciudadanos y residentes legales tienen derecho a la atención médica gratuita o a un precio muy reducido.
La Tarjeta Sanitaria Europea es un documento personal que acredita que usted es titular de un seguro de enfermedad cubierto por un Estado miembro de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza. Debido a que estos países tienen acuerdos de reciprocidad en materia de seguridad social, este documento le permite recibir tratamiento médico en cualquiera de ellos sin importar el costo. No obstante, existen limitantes y excepciones a lo que se considera tratamiento médico, por lo que es importante informarse antes de viajar.
La Tarjeta Sanitaria Europea no es necesaria para viajar dentro de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza. Si usted es titular de un seguro de enfermedad cubierto por uno de estos países, entonces su seguro le permitirá recibir tratamiento médico en cualquiera de los otros países. No obstante, es importante llevar consigo una prueba de su seguro médico en caso de que necesite recibir tratamiento médico durante su viaje.
La Tarjeta Sanitaria Europea solo cubre tratamiento médico imprevisto y no está diseñada para cubrir todos los costos de su viaje. Si usted sabe que va a necesitar tratamiento médico durante su viaje, entonces deberá comunicárselo a su seguro médico antes de viajar para asegurarse de que está cubierto. Algunos tipos de tratamiento médico, como la atención dental, pueden no estar cubiertos por su seguro médico o por la Tarjeta Sanitaria Europea. Si usted necesita tratamiento médico que no está cubierto por su seguro médico o por la Tarjeta Sanitaria Europea, entonces deberá pagar por el tratamiento de su bolsillo.
La Tarjeta Sanitaria Europea es gratuita y se puede solicitar a su seguro médico local. Si usted no es titular de un seguro médico cubierto por un Estado miembro de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza, entonces puede comprar un seguro médico privado que le cubra durante su viaje. Si usted compra un seguro médico privado, asegúrese de que cubre los mismos riesgos que están cubiertos por la Tarjeta Sanitaria Europea.